
Pescar con luna llena: guía práctica para que realmente piquen
La luna llena no es “mala” para pescar; solo cambia las reglas. Hay más luz, muchas especies comen de noche y en la costa las mareas son más fuertes. Con un par de ajustes en horarios, lectura del agua y presentación, puedes convertir una noche de luna llena en tu mejor sesión del mes.
Lo que cambia con luna llena (y por qué importa)
- Más luz = peces cautelosos. Ven mejor; si tu línea, bajo o anzuelo canta, se notará.
- Ventana nocturna más activa. Muchos depredadores (y forrajeros) se alimentan fuerte entre anochecer y medianoche.
- Mareas vivas en mar y estuarios. Mayor amplitud: corrientes más intensas, canaletas que “transportan comida” y remolinos poderosos.
- En aguas quietas (lagunas), la luz extra favorece desplazamientos al borde y actividad de insectos; al amanecer, algunos peces ya están “satisfechos”.
Traducción operativa: o pescas cuando ellos están activos (tarde/noche/primeras horas) o pescas donde aún tienen ventaja (sombras, bordes de corriente, estructuras que les dan cobertura).
Preguntas frecuentes
¿La luna llena “mata” la pesca?
No. Desplaza la mejor ventana a tarde/noche y pre-alba. Ajusta horarios y presentación.
¿Mejor señuelos oscuros o claros?
En agua clara y con mucha luz, naturales y perfiles limpios. Si el mar rompe fuerte, suma vibración.
¿Y si solo puedo ir al amanecer?
Llega muy temprano (2 h antes), apunta a sombras/estructuras y busca transiciones (canaletas, bordes).
¿Cómo aprovecho la marea viva?
Ubícate donde la corriente concentra comida: canaletas, puntas, entradas/salidas de ría. Ajusta peso y ángulo de deriva.
Deja una respuesta
Te puede interesar leer sobre: